domingo, 8 de mayo de 2011

¿Puede un Nobel de la Paz convertirse en asesino?


Recuerdo cuando se dio la noticia de que a Francisco Rivera le concedían la Medalla de las Bellas Artes. Varios personajes que la habían recibido anteriormente decidieron devolverla porque decían que no era digno de tal mención.

¿Algún premio Nobel de la Paz tiene pensado devolverlo después de que el Presidente de los Estados Unidos de América, Barack Obama, premio Nobel 2009, haya ordenado un asesinato?.

Entiendo que se otorga a la persona que haya trabajado más o mejor en favor de la fraternidad entre las naciones, la abolición o reducción de los ejércitos existentes y la celebración y promoción de procesos de paz. Un asesinato no entra dentro de esta descripción.

El Gobierno de Obama se ha saltado cualquier ley internacional, cualquier derecho internacional, con el fin de acrecentar su leyenda y entrar en Hollywood por la puerta grande, no en vano Kathryn Bigelow ,la directora ganadora del Oscar por En Tierra Hostil, ya está trabajando en la película.

Han hecho justicia reventando la cabeza a Bin Laden, buscando el clamor de todo su pueblo que sale a la calle con las barras y las estrellas, y su ya inevitable God save America.

Lo han hecho vinculando a uno de los grandes símbolos de la supervivencia de los americanos nativos con uno de los terroristas más odiados de Estados Unidos. Y una vez más la admiración que todo el mundo siente por ese conjunto de Estados nubla la vista para ver más allá.

Racismo socialmente aceptado al burlarse una vez más de los indígenas estadounidenses al denominar a Bin Laden, Gerónimo. Geronimo-E KIA" -enemigo muerto en acción.

Tienen un Presidente afroamericano pero no es suficiente para seguir considerando a los indios como enemigos de Estados Unidos. Un pueblo al que masacraron y al que intentaron exterminar encerrándolos en reservas como si de animales se tratara.

El Pentágono alega que Gerónimo no era en realidad el “sobrenombre” de Bin Laden sino el nombre con el que fue bautizada la “heroica” operación en su conjunto. Pero saben ustedes, señores del Pentágono, no hay que tener mucha cabeza para pensar que nos están tomando el pelo.

Y un cuerpo de élite del ejército estadounidense llega a la ciudad paquistaní de Abbottabad, después de un chivatazo. Asaltan la casa donde se encontraba el terrorista con su familia y guardia personal y matan a todo lo que se mueve incluida una mujer.

Llegan a la habitación donde se encuentra Osama Bin Laden y cumplen la orden: matarlo. Ni más ni menos. Aquí no hay orden de cogerlo y juzgarlo como hacen el resto de países, aquí como son estadounidenses pueden hacer lo que les da la gana y cuidado con protestar porque entonces estás contra mí y atente a las consecuencias. Aquí la ONU no pinta nada.

Primero dijeron que no iba armado, luego que sí, después que la que iba armada era una mujer que lo protegía. Un hombre de 54 años frente a un comando de Seals. Como si no conociéramos a los estadounidenses. ¿Quién se cree que iban a detenerlo y que actuaron en defensa propia?.

Pero aún tuvieron la desfachatez de contarnos que le hicieron un rápido entierro en la cubierta de un portaaviones de EEUU en el mar del norte de Arabia.

¿Os imagináis a los soldados americanos que ya conocimos en Abu Graid lavando el cuerpo de su terrorista más odiado y que permitieran recitar oraciones islámicas para cumplir con las leyes religiosas?.Y ojo, seguro que dentro del ejército norteamericano hay grandes personas pero ahora sólo me viene ese recuerdo a la cabeza o el de algunas escenas de Vietnam o Irak.

Dijeron que lo tiraron al mar envuelto en un sudario porque una tumba podría haber servido como punto de santuario y de peregrinación del yihadismo internacional. Asegurando que “fue una forma apropiada y respetuosa de enterrar el cuerpo”. Qué desfachatez. No es más que una humillación más de los norteamericanos a sus enemigos.

El jeque árabe Abdul Mohsen Al-Obaikan, asesor de la Corte Real de Arabia, dijo: "Esa no es la manera islámica. La forma islámica de enterrar a la persona es en la tierra (si es que ha muerto en la tierra) como a todos los demás...". Aconsejando enterrar a las personas sin ataúd, en contacto directo con la tierra y la cabeza orientada a la Meca.

Y es que además, Bin Laden pertenecía a una escuela islámica whabita por lo que el miedo a que su tumba se convirtiera en un santuario yihadista es exagerado, porque está prohibida la veneración de los muertos para evitar que se conviertan en falsos ídolos. Por ello en las tumbas de los reyes de Arabia Saudí no aparece grabado su nombre.

Es la religión musulmana la que permite dar sepultura en el mar a un difunto si la muerte ocurre en circunstancias tales como un largo viaje que pueda hacer que en el regreso el cadáver se descomponga o el peligro de que los enemigos exhuman el cadáver.

Según ha afirmado Mohammed al-Qubaisi, el gran 'muftí' de Dubai, "Pueden decir que lo han enterrado en el mar, pero no que ha sido de acuerdo con el rito islámico", sostiene "Si la familia no quiere [sus restos], es muy simple en el Islam: cavas una tumba en cualquier lado, incluso una isla remota, pronuncias las plegarias, y ya está".

Obviamente fotografías del cadáver no las vamos a ver porque entonces demostrarían una vez más que fue una venganza en toda regla y que se posiblemente el cuerpo esté completamente destrozado.

Y ahora hay muchas personas que hablan de haber hecho justicia. Sin ir más lejos hace unos días cuestionaban mi opinión llamándome “roja antiamericana”. Y no me queda otra más que decir ¿por qué no te callas?. La americanitis nos vuelve locos sin ver más allá. Nos meamos por todo lo que tiene barras y estrellas y no rascamos para ver la podredumbre de esa sociedad americana que nos muestra Hollywood.

Y no señores, América no es sólo la Estatua de la Libertad, Las Vegas o Rodeo Drive, hay mucha mierda en esa que algunos ignorantes tienen el valor de llamar “la mejor democracia del mundo”.

Pedir justicia para un terrorista como Osama Bin Laden no es fácil pero todo el mundo tiene derecho a ella, si no por qué nos rasgamos las vestiduras con el GAL. Uno es terrorismo de Estado y otro Internacional.Y los dos asesinos contra asesinos.

¿Qué pasaría si Sarkozy, Merkel o ZP hicieran lo mismo que Obama?

Y ahora vendrá una nueva reelección del Premio Nobel de la Paz.

Señor Obama, usted no es un hombre de Paz.

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